El renting se ha popularizado enormemente en el último año, habiendo incrementado la matriculación de vehículos destinados a este servicio en más de un 28,17% tal y como revelaron datos recientes de la Asociación Española de Renting de Vehículos. En total, este año 2021 se matricularon un total de 232.766 vehículos, obteniéndose inversiones de alrededor de 5.000 millones de euros, lo que implica un incremento del 31,62% con respecto al año 2020.
Estas tendencias crecientes de la demanda parecen ser debidas a las ventajas reportadas por los usuarios, entre ellas, la versatilidad de los contratos ofrecidos por las empresas de renting.
¿Pero en qué consiste exactamente el renting para coches?
El renting se trata de un contrato de alquiler a medio o largo plazo en el que un arrendador compra un vehículo y lo pone a disposición de un arrendatario a cambio de una cuota fija mensual. Dentro de este acuerdo se establece por cuánto tiempo dura el alquiler y el kilometraje a realizar.
Por lo tanto, hablar de renting para coches implica que un particular o empresa se puede beneficiar de todas las ventajas que tiene disponer de un automóvil, pero sin las problemáticas asociadas que suelen tener estos, como, por ejemplo, pagos de seguros, averías, etc.
Esto último se debe a que el mantenimiento y sustitución de los coches corren a cargo en todo momento del arrendador, así como otros servicios de interés como puede ser el servicio de asistencia en carretera, tal y como explica en su sitio web northgate.es, una de las empresas de renting más populares en España.
Sobre los tipos de renting
En función de las características del arrendador, el renting puede poner a disposición de los arrendatarios distintos paquetes, condiciones y servicios, aunque los más comunes son el renting fijo y el renting flexible:
- Con el renting fijo el arrendatario habitualmente estrena coche, teniendo la posibilidad de elegir el modelo y los servicios a incluir en el contrato. En este caso, el compromiso contractual tiene una duración a medio plazo.
- Con el renting flexible se selecciona el tipo de vehículo que se necesita, no tanto el modelo, de entre la gama disponible, por ejemplo un turismo, una pick up o incluso un todoterreno. La particularidad de este servicio es que el tiempo de contratación no se estipula de forma cerrada, sino que el arrendatario tiene la posibilidad de devolver el vehículo cuando quiera a partir de un mes como es en el caso de Northgate. Esta opción suele ser la más elegida por las empresas, ya que de ese modo se evitan las penalizaciones que supone el renting fijo en caso de tener que devolver el vehículo de manera anticipada. . Y también se adecúa a las necesidades de particulares que optan por un modelo similar al pago por uso ya extendido en otros hábitos y que llega también al de la movilidad.
¿Cuáles son las principales ventajas del renting para coches?
Si bien la principal ventaja del renting es la comodidad que entraña para los arrendatarios, es posible diferenciar ventajas específicas en función de si se es una empresa o un particular.
Por su parte, las empresas pueden poner a disposición de sus empleados flotas de vehículos, que suponen una deducción de impuestos. Sumado a ese ahorro que permite reinvertir en otras áreas de interés para el negocio, el hecho de alquilar vehículos en lugar de comprarlos tiene el beneficio de que se puede ir renovando los vehículos cada vez que caduca el contrato de alquiler, de modo que se potencia la seguridad de los empleados y la eficacia del transporte. Además, en el caso de la modalidad flexible, se puede devolver el vehículo si se deja de necesitar, evitando hacer frente a gastos innecesarios.
En el caso de los particulares, se eliminan todas las trabas que suele requerir la compra de un coche, así como el desembolso que implica su mantenimiento periódico. Sobre todo, si el particular precisa de un uso frecuente del automóvil el hecho de recurrir al renting suele ser una baza a favor, ya que este cubren todos los cuidados específicos que se desligan del uso frecuente de un automóvil, brindándole al igual que el caso de las empresas, la posibilidad de cambiar de vehículo cada vez que venza el contrato, o en el caso del renting flexible, si cambia su necesidad, sin tener que cumplir un período de permanencia para ello.
