El sector bancario está experimentando una transformación sin precedentes gracias a la incorporación de la inteligencia artificial (IA). Desde el análisis predictivo hasta la automatización de procesos, la IA está ayudando a los bancos a optimizar operaciones, reducir costos y ofrecer experiencias más personalizadas. De hecho, según Accenture, el 77% de los bancos ya utiliza IA para potenciar la eficiencia, y se estima que las tecnologías basadas en IA podrían generar hasta un billón de dólares en valor adicional en el sector financiero global para 2030.
En España, bancos líderes como BBVA han adoptado soluciones basadas en IA para mejorar la experiencia del cliente, desde chatbots inteligentes hasta plataformas de asesoramiento financiero automatizado. Además, el auge del open banking y la presión regulatoria del PSD2 están acelerando la necesidad de integrar tecnologías avanzadas que permitan competir en un mercado cada vez más saturado de nuevos actores, como las fintech.
Precisamente era Ricardo García, responsable global de Analytics Transformation en BBVA, quien abría el encuentro explicando cómo la inversión tanto en datos como en inteligencia artificial es ahora mismo algo estratégico para la entidad. Una inversión en IA que, añadía, persigue principalmente “la hiperpersonalización del servicio y la oferta que ofrecemos a nuestros clientes; una mejor toma de decisiones en ámbitos como el riesgo o el fraude; y la optimización de nuestros procesos para ser más eficientes dentro de la propia organización”.
Finanzas Inteligentes: IA Redefiniendo el Sector Bancario
Casos de uso a los que Marga García, directora de Banca en BABEL, añadía “la aplicación de la IA generativa al ciclo de vida del software” y tal vez uno menos tecnológico pero no por ello menos relevante, “una banca más inclusiva y humana, gracias al uso del lenguaje natural en la interacción con el cliente es posible llegar a personas que no tienen habilidades tecnológicas tan desarrolladas”.
Esa capacidad de “conversar” gracias a la inteligencia artificial era puesta en valor por Francisco Moreno, CEO de Logixs, que incluso compartía un proyecto con un banco en el que se utilizaron agentes conversacionales para justo ayudar a personas mayores de 60 años a interactuar con la entidad. “El 100% de ellos logró realizar la transacción que necesitaba”, afirmaba.
Ricardo García, responsable global de Analytics Transformation en BBVA.
En definitiva y como apuntaba Verónica Ordoñez, Key Account Manager FSI en SEIDOR, la clave también en esta transformación tecnológica son las personas. “Es esencial crear una cultura a nivel organización y establecer un gobierno de la IA, por normativa pero también por ética”.
Algo en lo que coincidía Rene Jägers, VP Sales de Signaturit Group, que aludía a la necesidad de “demostrar la trazabilidad y poder explicar cómo se ha llegado a una determinada decisión. La IA tiene que ser transparente, debe haber una gobernanza de los modelos y, hoy en día, es crítica la supervisión humana”.
Gobernanza y supervisión
Se imponen una especie de guardarraíles, “humanos que supervisan los modelos y modelos que supervisan a otros modelos”, apuntaba en ese sentido desde el BBVA Ricardo García al reiterar que “la aproximación a la IA tiene que ser un proceso seguro y transparente”.
Marga García, directora de Banca en BABEL
“Estamos en una ecuación en la que el 30% es tecnología y el 70% lo representan las personas, los casos de uso, los procesos… Por eso, al hablar de IA la aproximación siempre tiene que ser holística”, afirmaba Marga García, de BABEL.
Pero esa visión global no es el único requisito cuando hablamos de abordar la IA de forma correcta; aún son varias las barreras que hay que lograr saltar y que, recurrentemente, encontramos en la irrupción de nuevas tecnologías.
“Todo cambia tan rápido que lo primero que hay que preguntarse es qué quiero conseguir con la inteligencia artificial, después planificar cómo lo haré y ya por último aplicar la tecnología”, opinaba Rene Jägers, desde Signaturit Group.
Rene Jägers, VP Sales de Signaturit Group
Contar con una estrategia clara pero también con datos de calidad, ya que “sin datos hiperadecuados no puedes lograr y hacer hipercosas”, apuntaba el CEO de Logixs.
Y, cómo no, con talento especializado, “lo que supone a día de hoy una auténtica batalla, tanto para atraerlo como para retenerlo”, decía Ricardo García de BBVA y corroboraba Verónica Ordoñez, de SEIDOR: “La banca además no ha sido hasta ahora un sector demasiado atractivo, algo que es verdad empieza a cambiar ya que TI está cada vez más pegada a negocio, tiene un papel más relevante para la alta dirección”.
Verónica Ordoñez, Key Account Manager FSI en SEIDOR
Sea como sea lo que nadie duda es que la inteligencia artificial, con la generativa a la cabeza en los últimos meses, está redefiniendo el sector y con ello muchos los procesos y perfiles llamados a transformarse radicalmente.
Nuevos perfiles, nuevos retos
“El 70 por ciento de las tareas que se hacen en un banco pueden automatizarse según un informe de Mckinsey. Es decir, es necesario un reajuste y en ese proceso acompañar a los perfiles que van a cambiar”, reflexionaba Marga García.
Francisco Moreno, CEO de Logixs
En la misma línea se mostraba Ricardo García: “Hay perfiles que están obligados a reconvertirse pero mi visión es optimista: la IA no va a sustituir personas, le va a permitir una mejora de su productividad, van a poder centrarse en tareas de valor y dedicarse más a pensar”.
Un futuro en el que cambiarán los perfiles pero también la banca que hoy conocemos, que se volverá “más líquida”, según Francisco Moreno, “con capacidad para adaptarse de forma mucho más rápida a los cambios”.
Hiperpersonalizada, “según cada usuario, conversando con él y no solo recomendándole sino incluso ejecutando por él”, apuntaba también Verónica Ordoñez, de SEIDOR. Más inteligente y “humana”; así empieza a dibujar la IA el boceto de lo que será la banca del mañana.
Ricardo García (BBVA), Marga García (BABEL), Francisco José Moreno (Logixs), Verónica Ordoñez (SEIDOR) y Rene Jägers (Signaturit Group).